Justo al lado del castillo se encuentra el palacio de Holyrood. Este es el hogar oficial de la reina en Escocia, y ha sido el lugar de residencia de muchos miembros de la realeza a lo largo de los siglos. El palacio es impresionante por fuera, pero aún más impresionante es su interior, donde se puede encontrar una impresionante colección de arte, muebles y objetos históricos. También es el hogar de la capilla de Holyroodhouse, donde se celebran muchas bodas reales.

Pero Edimburgo es mucho más que su castillo y su palacio. La Royal Mile es una de las calles más famosas de la ciudad, y es conocida por sus tiendas, bares y restaurantes. Esta calle es el centro neurálgico de la ciudad, y es el lugar perfecto para disfrutar de la vibrante vida nocturna de Edimburgo. Aquí se pueden encontrar una gran cantidad de pubs y bares, así como una amplia selección de tiendas de souvenirs y restaurantes con comida típica escocesa.

El mercado de Grass Market es otro lugar emblemático de Edimburgo que merece la pena visitar. Situado en el corazón de la ciudad, este mercado es uno de los más antiguos de Edimburgo, y ha sido un lugar de comercio durante siglos. Hoy en día, el mercado es un lugar popular para comprar artesanía, ropa y recuerdos, además de ser un lugar ideal para disfrutar de un café o un té en alguna de sus terrazas.